POR PXPress
DESDE EL GOBIERNO DEL ESTADO DE COLIMA se viene emprendiendo una campaña de ataques sistemáticos y diseñados estratégicamente, de la mano de Arnoldo Vizcaíno Rodríguez, pagada con recursos públicos a la empresa BINOMIA (a la que se le ha dado 5 millones de pesos y que conoce perfectamente Víctor Vázquez Cerda), para favorecer a su candidato Sergio Fuentes, fueron las palabras de Martín Flores Castañeda, el viernes de la semana pasada, a tres días de que se lance la convocatoria para renovar la secretaría general del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado de Colima (STSGE). El ex diputado local y ex dirigente del PRI en la entidad le declaró la guerra a la gobernadora Indira Vizcaíno Silva, que hasta el momento insiste en otorgarles, de manera unilateral, “un incremento salarial injusto, inequitativo e incluso retrógrada, que afecta a la economía de cada trabajador y su familia”, señaló el dirigente sindical. “El sindicato ha decidido manifestar nuestra decisión unánime de mantenernos en pie de lucha en defensa de un salario justo y sobre todo un incremento justo con un salario digno”, añadió. Confirmada la campaña sucia que se implementó desde la Coordinación de Comunicación Social de la administración estatal, a Martín Flores ya no le importó la diplomacia y se le fue a la yugular a la mandataria en respuesta a las acusaciones de que ha sido objeto. Defendió su postura en el sentido de que el incremento del 7% al salario no afecta las finanzas públicas. Lo que sí afecta, dijo, es la excesiva contratación de plazas para funcionarios, que de enero a junio suman mil 400 servidores públicos más, equivalente a 880 millones de pesos. Lo que afecta a las finanzas del Estado es la adquisición de 153 patrullas mediante arrendamiento, con un costo de 300 millones de pesos, algo que denunció en su momento la presidenta municipal de Manzanillo, Griselda Martínez Martínez, que rechazó la oferta por el cúmulo de irregularidades que no se pudieron aclarar. Lo que también pone en riesgo la nómina del gobierno colimense es la adquisición de 5 camionetas blindadas, con valor de 3 millones de pesos cada una, para la gobernadora Indira Vizcaíno Silva. Y lo que también pone en riesgo al dinero del pueblo es el 300% de incremento para los viajes de la gobernadora. “Son un exceso”, lamentó Flores Castañeda. Hay que destacar que, en concordancia con lo que se dijo en el Xpress´o del lunes 4 de julio, el secretario general del STSGE también mencionó que hay un pacto de impunidad entre la gobernadora Indira Vizcaíno y el ex gobernador José Ignacio Peralta Sánchez, lo que obliga a los trabajadores a pagar por el quebranto financiero que no se atreve a castigar la administración estatal, aun cuando existen denuncias de parte del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado de Colima en la Fiscalía General del Estado y en la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción. “Hay una campaña que pretende denigrar, manchar, enlodar, mediante calumnias y difamaciones y grupos de troles, de cuentas de Facebook, creadas expresamente para golpear al dirigente sindical”, agregó Martín Flores Castañeda, centrando la mirada en uno de los que participa en esa estrategia de desprestigio, que cínicamente se encontraba en la conferencia de prensa, todo nervioso, transmitiendo en vivo con celular en mano. Hoy se lanza la convocatoria para renovar la dirigencia del STSGE. Estaremos atentos.
LA DESMEDIDA AMBICIÓN del gobernador de facto de Colima, Arnoldo Vizcaíno Rodríguez, ha generado una situación en la que el desgaste es para la hija que cobra como titular del Poder Ejecutivo, no para el ambicioso vejete, que se da vuelo haciendo lo que nunca pudo hacer por jamás haber sido un candidato competitivo en las filas del PRD, donde militó toda su vida, hasta que dejó el puro cascarón para irse a Morena. Con sendos fracasos a cuestas, en sus inútiles intentos de ser gobernador y luego senador de la República, hoy se cobra viejas afrentas de la mano de Indira Vizcaíno Silva. Si bien el poder formal es de su hijita, el real lo ejerce el padre. De ahí que él sea el que manda directamente en la Secretaría de Educación, donde tiene a su títere Adolfo Núñez González, al que hizo diputado local, regidor del Ayuntamiento de Cuauhtémoc y dirigente estatal del PRD. En lo que fue la Secretaría de Desarrollo Rural el anciano cuenta con su incondicional Jaime Calzonzin inspector Sotelo García, que también pasó por todos los cargos perredistas que estuvieron disponibles para los que fueron dueños del perredismo local: diputado, regidor, líder estatal del partido. Así, en su afán de querer tener el control sobre todo lo que se mueva en la entidad, ha intentado someter a los sindicatos que tienen relación directa con el Gobierno del Estado, aunque fracasó rotundamente al querer meterse en terrenos de los hermanos Guillermo y Federico Rangel Lozano, donde David Hernández Viera derrotó en toda la línea a Christian Cruz Vega, delfín de Arnoldo Vizcaíno para apoderarse de la Sección 39 del SNTE. El intento fallido en el sindicato del magisterio estatal no desalentó al padre de la Indi, pues ahora va por el dirigente del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Gobierno del Estado (STSGE), Martín Flores Castañeda, contra el que se ha desatado una embestida orquestada desde los dominios del vocero oficial del indirato, Miguel Ángel Vargas Vaca, que cuenta con nuevas adquisiciones para el golpeteo mediático cuatrotero: Eloyito García Alcaraz, Miguel Ángel Valencia y Fernando Álvarez Luján, conocidos popularmente como Los tres chiflados, aunque sin la gracia de los cómicos originales. Ese trío sigue unido, aunque ya cada quien por su cuenta enchufado a la ubre oficial, como el caso de Eloyito, al que por fin le cayó a sus manos la delegación federal de la Semarnat. En fin: sigamos. La batalla en contra del enanín de Martín Flores ya está en marcha, pero es casi un hecho que de nueva cuenta morderá el polvo el delfín del viejo cacique de Buenavista. No sólo con el STSGE: también tratará de tener el control sobre otros sindicatos locales que son de su interés, como el de los trabajadores de la Secretaría de Salud y Bienestar Social y la Sección 6 del SNTE. El viejón tratará de inmiscuirse en la vida interna de esos organismos gremiales, aunque los problemas no serán para él, sino que los platos rotos los tendrá que pagar esa que hace como que gobierna. En esta dinámica de meterse donde no lo llaman, Arnoldo Vizcaíno ha abierto un nuevo frente a su hija en el municipio de Manzanillo, donde le ha dado poder a dos mujeres periodistas que se identifican con el indirato, la señora Archundia y otra que ha traicionado a todos los que en algún momento le han echado la mano, comenzando por el que fuera su pareja sentimental mientras tuvo una buena chamba en el gobierno de José Ignacio Peralta. El caso es que esas dos arpías, empoderadas por el dizque veterano “luchador social”, creen que en el puerto no se mueve la hoja de un árbol si no es con su autorización (eso es lo malo de darles tantita cuerda a los pendejos), de ahí que estén furiosas esas mercenarias porque Indira Vizcaíno nombró sin su consentimiento como rector de la Universidad Tecnológica de Manzanillo a Ramón Núñez de la Mora, pues una de las dos quería quedarse con el cargo que le tocó a ese funcionario. Las dos mujeres del puerto dicen que no descansarán hasta dejar fuera de la UTC a Núñez de la Mora y verse alguna de las dos en su lugar, lo que evidentemente creará un conflicto donde no lo hay: ¿quién manda realmente en Colima? ¿El gobernador de facto o la gobernadora formal? Un gobierno a cuatro manos nunca ha dado buenos resultados en una democracia en la que se elige solamente a uno (a) para que gobierne. Por lo pronto, habrá que recordarles a los nuevos ricos de la política en Colima que todo exceso es malo.
MUCHA INCONFORMIDAD CAUSA a los colimenses saber que los partidos políticos con registro son un jugoso negocio para sus directivos, tanto los nacionales como los locales. El caso del PVEM y del MC, cuyos dueños en Colima son Virgilio Mendoza Amezcua y Leoncio Locho Morán Sánchez, respectivamente, son el claro ejemplo de lo que es ir a la segura en el ganar-ganar. Así, después de una elección en la que ambos candidatos a la gubernatura del estado sólo dividieron el voto para favorecer a la morenaca Indira Vizcaíno Silva, el premio a su deslealtad para con el pueblo fue un generoso subsidio del que disfrutarán durante los siguientes tres años, hasta que haya nuevos comicios en 2024, aunque el producto del esfuerzo que se haya realizado entonces se verá reflejado al inicio del 2025. Por lo pronto, a partir del primero de enero del presente año, el Verde Ecologista y Movimiento Ciudadano se llevarán un millonario ingreso por concepto de prerrogativas de ley, aun cuando ninguno de los dos partidos cuenta con una estructura que los obligue a realizar grandes gastos, por lo que más bien toda la bolsa será para el vencedor. El partido de Virgilio tendrá una aportación mensual, de parte del Instituto Electoral del Estado (IEE), de 397 mil 536 pesos, además de otros 11 mil 706 pesos por “actividades específicas”. Al año se habrá embolsado el cachetón del puro 3 millones 180 mil 450 pesos. Por su parte, a Locho Morán no le irá nada mal tampoco: llenará sus bolsillos mensualmente con 341 mil 757 pesos, además de otros 10 mil 32 pesos por el mismo concepto. Al año habrá caído a las arcas del Diablo de la Barata Permanente la cantidad de 2 millones 734 mil pesotes. ¿Qué harán con ese dinero los dos políticos? No es un misterio: harán su guardadito para sus respectivas próximas campañas a algún cargo de elección popular, donde el dinero fluirá sólo para sus campañas. Los demás candidatos, si acaso, recibirán una manta o un bote de pintura (verde o anaranjada), si bien les va. Dirán que, si ellos son los dueños de la franquicia estatal, nada de malo tiene disfrutar de las mieles que su esfuerzo les ha costado… a los ciudadanos que votaron ingenuamente por ellos. Eso sí, no hay ninguna duda de que ambos personajes de la picaresca local son los hombres más agradecidos con la vida, sobre todo, con el IEE.