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Candidatos a dirigir la sección 39 del SNTE

AUNQUE SIEMPRE SE PRESENTÓ como un antagonista de la dirigencia de la sección 39 del SNTE y usurpó el lugar que le correspondía a Carlos Alberto Robles Fuentes (tanto que hasta incluyó a su viuda en la secretaría de organización), Christian Vega Cruz es discurso y demagogia, pero en el fondo no es muy diferente a Heriberto Valladares Ochoa ni todo el tiempo fue su detractor. El 11 de abril del 2016, en su cuenta de Facebook, Vega Cruz escribió: “SALVEMOS NUESTRAS PLAYAS SNTE-EDS Mtro Heriberto Valladares Ochoa, líder de la Sección 39 del SNTE y docentes, estudiantes y padres de familia, concluyeron con éxito esta jornada” (se respeta la mala calidad en su redacción). En mayo del mismo año, por ejemplo, dijo: “El Mtro. Heriberto Valladares Ochoa presente en la clausura de la Semana Cultural en la Esc. Prim. Est. José Ruiz Villalvazo TM. Felicitó la participación de maestros y padres de familia” (se respeta, de nueva cuenta, la pésima redacción). Y en noviembre, Christian Vega escribió: “De parte del Secretario General de la Sección 39 del SNTE el Mtro. Heriberto Valladares Ochoa, se hace la más cordial invitación a que acudas a presenciar las diversas actividades culturales y deportivas del día de hoy. #SNTE39Unidos” (disculpen, pues, la penosa redacción del “maestro”). Y así, revisando su perfil, se pueden encontrar más muestras de respeto y admiración de Vega Cruz a Valladares Ochoa. Pero lo más relevante fue lo sucedido el pasado 3 de junio de este 2022, no del año pasado ni del 20 ni del 19 ni del 18; ¡del 2022! ¡De este mismo mes! Ese día se llevó a cabo el Séptimo Pleno Seccional Extraordinario, donde Heriberto Valladares Ochoa y la secretaria de Finanzas entregaron cuentas y dieron un informe sobre las acciones realizadas en su periodo. Se dijo: “existe evidencia plena que el patrimonio sindical se ha incrementado y se ha manejado en sano equilibrio entre ingresos y egresos”. Y finalizó: “Es de probarse y se aprueba el informe de ejercicio financiero del comité ejecutivo de la sección 39 del SNTE, presentado por la profesara Myriam Gudiño Espíndola, secretaria de Finanzas de la sección 39 del SNTE”. En lo general, todos los asistentes levantaron la mano. “¿Algún voto en contra?”, preguntaron. Nadie lo hizo. “En lo particular, ¿hay algún agregado a los considerandos y resolutivos, alguna observación respecto al contenido del dictamen?” Nadie manifestó nada; todos aprobaron con la mano en alto. “Es aprobado en lo general y en lo particular el dictamen que nos presenta la comisión para el informe de la secretaria de Finanzas”. Adivinen quién, entre todos los que aprobaron en lo general y en lo particular, estaba en dicha sesión. Exacto: Christian Vega Cruz. Aprobó en lo general, sin emitir voto en contra; aprobó en lo particular, sin agregar nada acerca de los considerandos y resolutivos del dictamen sobre las finanzas de la sección 39 del SNTE. ¿Qué quiere decir esto? Que todo lo que haya dicho en la campaña es mentira; nada de lo que cuestionó es genuino porque en el lugar que tendría que hacer alguna manifestación de desaprobación, como el Séptimo Pleno Seccional Extraordinario, no sólo no lo hizo, sino que aprobó todo lo que presentaron. ¿Qué fue lo que cambió, entonces? Que Christian Vega Cruz, aconsejado por su verdadero patrón y mecenas político, el corrupto Nicolás Contreras Cortés, hizo leña del árbol caído. Lo más fácil, a la hora de hacer campaña, es hablar mal del que se va. Sucedió con la elección para gobernador: lo más sencillo era colgarse de la pésima administración que tuvo José Ignacio Peralta Sánchez. Difícil tarea era defender un gobierno que se olvidó de la sociedad y que prefirió, para no ser encarcelado, pagar a los bancos en lugar de pagar a los trabajadores, quienes se quedaron sin sustento por varios meses. Hacer leña del árbol caído, en este caso de Valladares Ochoa, era lo más rentable; tan sólo cuestionarlo iba a provocar entusiasmo y respaldo de quienes, al igual que los trabajadores del gobierno del Estado, también se las vieron negras para pagar lo necesario para sobrevivir. Christian Vega Cruz, en lugar de hacer propuestas y ver hacia adelante, prefirió atacar y emprender una campaña de desprestigio contra la dirigencia saliente, llevadas a cabo por sujetos impresentables como el mencionado Contreras Cortés, Oscar Javier Hernández Rosas y algunos pasquineros en redes sociales, quienes también lograron meter a sus esposas en la planilla de la manzana envenenada. Para David Hernández Viera lo más sencillo hubiera sido cuestionar al secretario general saliente y prometer la luna y las estrellas; así hasta se hubiera ganado el apoyo de los que estaban en el ala radical. Pero no se trataba de ganar a costa de lo que sea, como sí lo hizo en todo el momento Christian Vega Cruz. Hoy jueves 16 de junio, pues, los maestros tendrán la oportunidad de elegir al que será su próximo secretario general de la sección 39 del SNTE. Cuando crucen la boleta, sólo recuerden todo el daño que les hizo el gobierno de Ignacio Peralta cuando dejó de cumplir los compromisos con el gremio y dejó de pagarles desde junio del 2021. Pues eso es lo que sucederá si eligen a quien tiene todo el respaldo del gobierno del Estado, a través del Félix Salgado Macedonio colimense, Arnoldo Vizcaíno Rodríguez. No permitan que se vuelva a arrodillar el dirigente a la administración estatal; eso sería no aprender de los errores cometidos.

En Manzanillo se hizo lo que se ha calificado como «El robo del siglo».

LO HAN CALIFICADO COMO EL “ROBO DEL SIGLO”, y con justificada razón: en el puerto de Manzanillo, a cargo de la Marina, sin que nadie se diera cuenta, hace algunos días se desaparecieron 20 contenedores que se encontraban en las instalaciones de la API, en cuyo contenido había oro, plata, zinc y aparatos de TV, estos últimos lo menos valioso del enorme cargamento. La valiosísima mercancía de los metales preciosos no pudo haber sido robada tan a la ligera en un lugar custodiado por elementos de la Marina, pues se supone que los mandos marinos están para vigilar las instalaciones en las que diariamente se manejan cientos de toneladas de diversas mercancías procedentes de diversos puntos del globo; en especial, de los países asiáticos con costa en el Pacífico. Las autoridades, comenzando por las estatales (con nuestro artista exclusivo, el vocero de la muerte, Gustavo Joya), han tratado de minimizar el tremendo latrocinio con el argumento infantil –que suena estúpido— de que no era la valiosa mercancía señalada originalmente, sino ¡jugos de durazno y llantas!, algo que se reduce en su valor a la mínima expresión, considerando que no hay punto de comparación entre lo que valen las grandes cantidades de oro, plata y zinc sustraídas, con unos pinches juguitos y unas llantas. La intención de desmentir la información con patrañas de lo más idiotas se debe a que los responsables de salvaguardar las instalaciones portuarias del país, entre las que entra nuestro importante puerto colimense, son nada menos que los miembros de la Marina, los consentidos del régimen cuatrotero, junto con los militares y la Guardia Nacional. Un robo de semejante envergadura deja en evidente ridículo a las fuerzas armadas –de tierra, mar y aire—, quienes fueron indolentes al no haberse percatado que 20 contenedores con la valiosísima carga estaba pasando enfrente de sus propias narices. Tantos contenedores no se mueven tan fácil sin que alguien se dé cuenta, así como tampoco se pueden ocultar en el patio trasero de una casa. Más que ineptitud, parece que se trata de complicidad, de ahí que lo sustraído haya cambiado milagrosamente de giro y, por supuesto, de valor. Así, pues, se pasó de metales preciosos a simples jugos y burdas llantas que ya no resultan ser tan atractivas. Ahora, después del robo del siglo, todas las autoridades con algo que ver en el tema andan tratando de restarle valor a la información, pero sólo hasta que le dio la vuelta al mundo, no tanto por lo valioso del monto, sino por ser la Marina la que no pudo impedir que ocurriera el atraco. Increíble: son los consentidos del régimen.

CON UN RÉCORD DE DERROTA TRAS OTRA, con la pérdida de una docena de gubernaturas desde que asumió el cargo (sin haber ganado ninguna hasta la fecha, salvo en el estado de Durango, donde fue en alianza con el PAN y el PRD), el presidente del CEN del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, se aferra al hueso con el que pretende quedarse hasta el 2023, cuando vence su periodo y ya haya hecho los arreglos necesarios para el reparto de candidaturas a disputarse en el siguiente año, incluida la de la presidencia de la República. La salida sensata para el tal Alito Moreno sería abandonar el cargo, como lo han sugerido los expresidentes y figuras legendarias del priismo nacional, a fin de permitir que nuevos mandos se hagan cargo de recomponer lo que queda del otrora invencible partido. Sin embargo, el corrupto, ambicioso, vil y traidor dirigente nacional se niega a dejar la presidencia, como si en ello se le fuera la vida. En videos ilegales en los que lo han exhibido como corrupto y sinvergüenza se encuentra la verdadera personalidad de ese despreciable político campechano, pero ni por equivocación tiene la dignidad de hacerse a un lado; por el contrario, se ha afianzado muy bien, al haber maniobrado para mantener el control de toda la estructura del partido que, si bien muy debilitada, es la que mejor organizada está. La estructura incluye los partidos estatales, donde, como en el caso de Colima (con Arnoldo Tony Soprano Ochoa González, que no necesita tarjeta de presentación), el repulsivo Alito Moreno cuenta con cómplices para apropiarse de candidaturas a repartirse en el 2024, como en un tianguis político, pues está visto que ese individuo es capaz de rifar a su propia madre, si es que aún la tiene. La alianza que han mantenido desde el 2021 priistas, panistas y perredistas (con la posible integración de Movimiento Ciudadano, aunque su líder nacional, Dante Delgado, se comporta como prostituta cara) sólo funcionará en 2023, pero sobre todo en 2024, con dirigentes partidistas con un poco de mayor solvencia moral, algo de lo que carece por completo el exgobernador de Campeche. La permanencia de este sujeto pone en riesgo una alianza que, en los comicios del 2023 de Edomex y Coahuila, últimos bastiones del PRI, se jugará su resto. No debe arriesgarse la estratégica alianza por culpa del capricho de un individuo que, como Alito, resulta poco confiable por traidor.