POR Jorge Octavio González
Primero hay que comparar los dos grandes desfalcos de la pasada administración federal y ésta para dimensionar el tamaño de la corrupción que hoy se solapa desde las más altas esferas de Palacio Nacional.
La Estafa Maestra se hizo entregando 7 mil 670 millones de pesos en contratos ilegales; participaron 11 dependencias federales, 8 universidades y más de 50 funcionarios.
En el organismo federal Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex), de acuerdo a los hallazgos de la Auditoria Superior de la Federación, en el 2021 se encontró un probable daño a la hacienda pública por 2 mil 346 millones; a eso hay que sumarle 12 mil 962 pesos de la cuenta pública 2019 y 2020, que sigue sin solventar la dependencia, lo que hace una suma total de 15 mil 308 millones de peos.
En el primer desfalco, que pertenece a la administración de Enrique Peña Nieto, sólo la titular de una secretaría, Rosario Robles Berlanga, fue encarcelada por motivos diferentes a lo que se le acusó; al final terminó absuelta por la cuestión penal, llevándose el juicio en libertad por la vía civil. Nadie más, ni los rectores de las universidades ni las otras dependencias de gobierno ni los más de 50 funcionarios involucrados, han pisado la cárcel ni han regresado lo robado.
En el segundo desfalco, ya en la administración de Andrés Manuel López Obrador, el titular de Segalmex fue separado de su cargo, no para enfrentar los cargos por el desvío millonario en su dependencia, sino para ser nombrado en la CELAC, un organismo sin importancia donde tendrá un sueldo seguro e impunidad.
Y hablando de impunidad, cuando se le cuestionó al presidente López Obrador sobre las irregularidades detectadas en Segalmex por la Auditoría Superior de la Federación, desde Palacio Nacional respondió que Ignacio Ovalle era una muy buena persona, pero que su error fue llevarse a priístas a trabajar al organismo Seguridad Alimentaria Mexicana y ellos se dedicaron a robar y a engañarlo. Así el cinismo del presidente de la República.
¿Alguien más detenido por este desfalco multimillonario que rebasa por más del doble a la Estafa Maestra, estandarte de la corrupción que la 4T utilizó en campaña para hablar sobre la corrupción en los gobiernos priístas? Sólo unas órdenes de aprehensión en contra de funcionarios menores, señalados por los delitos de delincuencia organizada, operaciones con recursos de procedencia ilícita y peculado.
De las 22 órdenes de aprehensión que libró la Fiscalía General de la República, sólo 12 fueron para funcionarios de Segalmex, cuatro pertenecen a las empresas con las que se coludieron y seis fueron los beneficiarios de los recursos de Segalmex que fueron desviados.
Y ojo: esto es sólo por 142 millones 440 mil 883 pesos, faltando aún por saberse cuántas más personas están involucradas en el desfalco de más de 15 mil millones de pesos. Lo peor es que estos hallazgos comprenden los años 2019, 2020 y 2021, faltando todavía el 2022 y lo que resta del sexenio.
Y pensar que los que hoy gobiernan llegaron al poder haciendo escándalo por los 7 mil 670 millones de pesos que representó la Estafa Maestra.
El candidato que salga de la oposición tiene un manjar suculento de pruebas que puede explorar en la campaña electoral para posicionarse frente a las corcholatas de López Obrador.