POR Luis Fernando Moreno Mayoral
Ha quedado claro que las candidaturas de Viridiana Valencia Vargas y Margarita Moreno González fueron revocadas por la serie de impugnaciones que interpuso ante la autoridad electoral la alianza que arropa a Riult Rivera.
Si no emplean los recursos legales por cuestiones en realidad banales y sin sentido, como sucedió en la pasada elección cuando nadie del PRIAN denunció a Ana Karen Hernández por haber sido candidata en un distrito diferente al que ganó en la pasada elección, como sí lo hicieron con Francisco Rodríguez García, seguirían en el juego electoral las abanderadas de Movimiento de Regeneración Nacional y de Movimiento Ciudadano.
Su frágil masculinidad, la cobardía de competir contra dos mujeres, orilló al candidato del PRI y del PAN a la presidencia municipal de Colima a avalar todos los recursos legales que se interpusieron con tal de sacar de la competencia a quienes lo hubieran lanzado hasta el lejano y humillante tercer lugar.
Riult Rivera es el más beneficiado de la actuación delincuencial del Tribunal Electoral de Colima, donde al menos la magistrada María Elena Díaz Rivera fue tan cobarde como para dejarse presionar por quienes hicieron lo mismo en la elección de Gustavo Vázquez Montes y en la de José Ignacio Peralta Sánchez, donde hubo amenazas de muerte de por medio para no dar un resultado adverso a la mafia que tiene a Colima en el terror de la delincuencia organizada.
¿A poco cree Riult Rivera, el candidato de los ex gobernadores más corruptos y sanguinarios que ha tenido Colima, que esta jugada lo va a legitimar si llega a ganar la elección el 2 de junio?
Por supuesto que no: aun en un eventual triunfo del candidato del PRIAN, sería tan ilegítimo como Felipe Calderón Hinojosa y arrastrará el mote de espurio el tiempo que sea presidente municipal.
Riult Rivera será recordado como un cobarde y misógino que prefirió no enfrentarse a dos mujeres por su frágil masculinidad y, a través de recursos legales, amenazas de muerte y de encarcelar a magistrados y sus familias, sacarlas de la contienda por la alcaldía de Colima.
Sólo que hay una mala noticia para el candidato del PRIAN y de los ex gobernadores que pactaron con el crimen organizado: en la contienda tendrá que enfrentar a otra mujer, Azucena López Legorreta, que en menos de tres semanas hundirá a Riult Rivera en el segundo lugar.