++También le negaron su derecho a la pensión del FOSAP
POR Luis Fernando Moreno Mayoral
Después de varios años de ser ignorado por todas las autoridades, tanto universitarias, estatales y federales, además de acudir a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el rector Christian Torres Ortiz Zermeño tomó la determinación de dar solución al despido del ex líder del Sindicato Único de la Universidad de Colima, Leonardo César Gutiérrez Chávez:
Darle la exorbitante cantidad, por 31 años de laborar en la Universidad de Colima, de nada más y nada menos que 64 mil pesos. Qué generoso. Qué espléndido.
Nomás una cosa: no tendría derecho a la pensión del FOSAP, el famoso Fondo Social de Apoyo al Pensionado por el que emplazó a huelga y terminó depuesto del SUTUC en una maniobra entre la casa de estudios y el gobierno del Estado.
Gutiérrez Chávez informó, el pasado 14 de diciembre de 2023 en sus redes sociales, de la determinación del rector Ortiz Zermeño a través de la “Junta Accidental de Conciliación y Arbitraje”.
“Su actuación y decisión los embarra como RATAS”, añadió en el escrito en su cuenta personal de Facebook a propósito de la generosidad del rector de la Universidad de Colima para dar fin a la denuncia interpuesta por el ex líder del SUTUC por despido injustificado.
Y finalizó: “Mi postura es FIRME: Los $64,000.00 que lo hagan ROLLITO y se lo acomoden. Buen provecho y felices fiestas decembrinas”.
A Christian Torres Ortiz Zermeño se le olvidó que, de acuerdo a lo que narró Leonardo Gutiérrez Chávez hace unos años en un programa de internet, la forma en que lo despidieron fue digno de un pasaje de la novela El Padrino, de Mario Puzo.
Un día lo citaron a Rectoría para ver algunos asuntos referentes a la institución educativa; estaba en una sala de juntas con algunas autoridades universitarias y miembros del SUTUC. Refiere que, como si se tratara del presidente de los Estados Unidos, entró el equivalente al servicio secreto y revisaron el lugar para ver si era seguro.
Una vez que los alrededor de 10 sujetos se percataron que no había ninguna anomalía en el sitio, a una seña del jefe de ellos entró el rector y, sin sentarse, simplemente le informó a Leonardo Gutiérrez que desde ese momento quedaba despedido y tenía prohibido el ingreso a cualquier instalación de la casa de estudios en cualquier parte del Estado. Acto seguido se dio la media vuelta y salió de Rectoría.
Años después, ya con otro rector, aunque con conocimiento de la situación por ser parte de la Universidad de Colima desde entonces, Christian Torres Ortiz quiso zanjar el problema con la friolera de 64 mil miserables pesos por 31 años de trabajo en la institución, pero además sin derecho a la pensión del FOSAP.
Días después del ofrecimiento, Leonardo Gutiérrez Chávez arremetió de nueva cuenta en contra del rector de la Universidad de Colima: “El rector Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño, no es Honesto. Es Corrupto y RATA”.
Ahí tiene su respuesta, señor rector.