Manumisos

POR José Luis Santana Ochoa

Los copropietarios del Partido Verde Ecologista en el estado de Colima, Virgilio Mendosa Amezcua y Gabriela Benavides Cobos, perdieron ya el control del que fuera su rebaño en el estado de Colima, particularmente en el Primer Distrito Electoral Federal, pero todavía conservan el respaldo de los señoritingos, niños verdes, dueños de ese negocio a nivel nacional, que pudieran investir al primero candidato a senador de la Republica, y a la segunda meterla a disputar la alcaldía porteña. Todo puede suceder en la Viña del Señor, del señor Andrés Manuel López Obrador.

Los pastores que les trabajaron la plaza en las elecciones de 2021, los están dejando solos de cara a las programadas para el domingo 2 de junio de 2024. Es clara y evidente la desbandada de quienes en Virgilio y Gabriela creyeron, embarcándose como candidatos a diferentes cargos de elección popular en los comicios inmediatos anteriores, metiéndoles dinero, tiempo y esfuerzo a sus respetivas campañas que solamente sirvieron para que ambos porteños de corazón incrementaran a medio millón de pesos el subsidio mensual por parte del Instituto Electoral del Estado de Colima.

Decepcionados, los ex candidatos verdes ecologistas conversos dejaron chiflando en la loma a Mendosa Amezcua y Benavides Cobos, como la regidora de Manzanillo, Rosa Irene Herrera Sánchez; el alcalde de Minatitlán, Cicerón Alejandro Mancilla González; el de Cuauhtémoc, Rafael Mendosa Godínez; el de Comala, Sergio Agustín Morales Anguiano; y el ex presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, José Manuel Roñero Coello.

También les perdieron la fe a Gabriela y a Virgilio, todavía franquicitarios del PVEM en el estado, quienes, sin haber sido candidatos como el ex regidor capitalino y ex Presidente de CANIRAC Colima, Juan Carlos Gómez Díaz, les dieron acogida, acompañamiento social y respaldo, en el Primer Distrito Electoral Federal donde casi nadie los conocía, fortaleza que ahora que todos ya los conocen, que saben cómo se las gastan, es su mayor debilidad.

A Gómez Díaz y al grupo de personas representativas de la llamada Sociedad Civil que lidera, les ha quedado claro que pueden participar en la próxima contienda electoral sin el pernicioso intermediarismo de la cúpula verde ecologista estatal; que les puede ir mejor como sujetos activos de las decisiones políticas que tomen, que como marionetas de Virgilio y Gabriela que sólo a sus santos les rezan.

La ausencia de Virgilio y Gabriela en las recientes reuniones del grupo político convocadas por su líder Juan Carlos Gómez Díaz, con diferentes grupos de ciudadanos interesados en el devenir político del muncipio y del estado, más otros acercamientos del tercer tipo con operadores políticos de MORENA, es claro indicador de que ese grupo que hace poco más de dos años se conformó en torno a Virgilio Mendosa Amezcua y Gabriela Benavides Cobos, se ha independizado de estos dos sujetos nada dignos de fiar.

Tiempo y oportunidad habrá de constatar si los ex virgilistas del valle de Colima mantienen o no su independencia respecto de quien únicamente se guía por el negocio como hace años lo gritó a los cuatro vientos con dos o tres tequilas entre echo y espada, y si son capaces o no de concertar sin intermediarios alianzas políticas y electorales de cara al domingo 2 de junio de 2024.

EL ACABO

 La clave para lograr buenos resultados en las urnas el domingo 2 de junio de 2024, está en las alianzas que logren hacer los candidatos con los ciudadanos, no con las siglas y colores partidistas.

 Juan Carlos Gómez Díaz, empresario restaurantero que incursionó en la política partidista como candidato a regidor del H. Ayuntamiento de Colima en la planilla 2012/2015 que encabezara Federico Rangel Lozano abanderado por el Partido Revolucionario Institucional, tiene en su mira una curul en la próxima LXI Legislatura Local por la vía de mayoría relativa, para lograr la cual decidido está a meterse al ruedo político electoral.