POR Jorge Octavio González
Si, como dijo el nuevo secretario de Seguridad Pública de Colima, la estrategia de seguridad implementada en la entidad la diseñó la gobernadora Indira Vizcaíno, ya nos queda claro por qué este caos e infierno desatado a partir del 25 de enero del 2022.
Aunque no estaba programada su participación en la presentación que hizo la mandataria de su persona, el comandante Héctor Alfredo Castillo Báez no quiso desaprovechar la oportunidad para hacer uso de la voz.
Indira Vizcaíno, al no tenerlo contemplado entre los funcionarios que hablarían en el show de stand up Diálogos por la Transformación, se vio titubeante ante la posibilidad de que el militar hablara; al final no le quedó de otra más que darle el espacio en su conferencia para que externara lo que a su ver fuera conveniente.
Lo primero que hizo Castillo Báez fue presentarse y decir que en Colima había una estrategia de seguridad bien delineada elaborada por la mandataria estatal con el gobierno federal; indicó que no había necesidad de cambiarla porque la que estaba funcionaba y sólo habría que perfeccionar algunos detalles para tener mejores resultados.
Todas las veces que Indira Vizcaíno ha hablado sobre el tema de la seguridad, ha reiterado que es el gobierno federal el que diseña la estrategia y que son ellos los responsables de que sus fuerzas armadas combatan a las bandas criminales.
Pero ahora el sustituto de Manuel Llerandi Ruiz desmintió tanto a la gobernadora como al gobierno federal: si Indira Vizcaíno participa y aporta en la estrategia de seguridad, entonces sí se le tiene que hacer responsable de lo que pase en los diez municipios de la entidad.
Y con esto tampoco la mandataria puede deslindarse del terror y la ola de violencia en Colima. Antes se podía justificar diciendo que en el gobierno del Estado sólo apoyaban a las fuerzas federales en el combate al crimen organizado; ahora ya no lo podrá decir porque también ella es parte de esa estrategia fallida que no ha dado resultados desde el día uno de su implementación.
Tremenda exhibida que el comandante Héctor Alfredo Castillo Báez le dio a la gobernadora Indira Vizcaíno. Tal vez por ello la mandataria se la pensó dos veces antes de permitirle que hiciera uso de la coz en los Diálogos por la Transformación. Ya ni modo: el secretario de Seguridad Pública habló y exhibió a su jefa como parte de esa fallida e ineficiente estrategia de seguridad que se implementa en Colima.
Ahora que sabemos que la gobernadora diseña la estrategia de seguridad de Colima, habría que hacernos varias preguntas. ¿Qué sabe Indira Vizcaíno de seguridad? ¿Quién le dijo que sabe algo sobre estrategias de seguridad? Si pactó con criminales para llegar a la gubernatura, ¿cómo es que su estrategia va a ir encaminada a combatir a sus aliados? Y si incumplió los acuerdos convenidos con el crimen organizado, ¿por qué no logran detener a los líderes?
Porque, hay que decirlo, las detenciones de dos de los principales generadores de violencia en la entidad se dieron en la Ciudad de México y en Jalisco; y en ninguno de los operativos se dio parte a Colima por la desconfianza que les tienen las áreas de inteligencia de la SEDENA y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del gobierno de la CdMx.
Siempre que hay ejecuciones, balazos a plena luz del día y bombas molotov que incendian casas y automóviles, la gente suele culpar en su totalidad a la Federación; ahora ya no tendrá pretextos porque el gobierno del Estado es parte del diseño de esa estrategia, y la gobernadora Indira Vizcaíno es tan o más culpable de la violencia como el gobierno federal.
Ya no hay excusas: Indira debe dar resultados; de lo contrario, la gente puede pedir su revocación por ineficiente.