La Fiscalía de Colima es igual de corrupta ayer como hoy

POR Jorge Octavio González

Aunque se le cambió el nombre al final del periodo de José Ignacio Peralta Sánchez y se nombró a otro titular, la Fiscalía General del Estado de Colima ha sido corrupta en el periodo del ex gobernador como en el de Indira Vizcaíno.

Cambian los titulares, uno corrupto por otro inepto y farsante; la estructura es la misma y los ministerios públicos, así como el demás personal, es el mismo. Cambió todo para que siguiera igual.

Y un claro ejemplo de lo anterior es el caso de la detención de una joven en la pasada administración, con pruebas fabricadas y toda la cosa, que bajo el mando del mini fiscal Bryant Alejandro García Ramírez se continuó con la farsa a tal grado de deslindarse del caso para pasársela a la Fiscalía General de la República.

La madre de la joven, de nombre Ana María Vera Ibarra, una mujer que ha sacado fuerzas debajo de las piedras, ha sido muy consistente en su crítica al sistema actual y, sobre todo, a las corruptelas de la Fiscalía de Colima.

En redes sociales, sobre todo en grupos de whats app, es muy activa y difunde información constantemente, lo que le ha atraído críticas de parte de los empleados del gobierno del Estado que se infiltran en dichos grupos para distorsionar el debate e insultar.

Como toda madre, la desesperación la invadió: es así que convocó a conferencia de prensa hace días para dar a conocer el expediente completo de cómo fue la detención de su hija y su pareja por parte de empleados de la Fiscalía de Colima en la pasada administración.

Más de una hora tardó en relatar todo lo sucedido desde el principio; sin embargo, el caso se resume en que le fabricaron delitos a su joven hija y a su pareja, algo que en las instancias competentes no pudieron sostener los agentes judiciales y, con el cambio de administración, el mini fiscal impuesto por el mismo Nacho Peralta determinó que el expediente debía continuar con las irregularidades y violaciones al debido proceso.

Justo cuando dio su versión de los hechos, Ana María Vera denunció que ahora le estaban fabricando otro problema a su hija dentro del CERESO donde se encuentra recluida desde hace más de un año, todo porque se atrevió a alzar la voz y denunciar ante la opinión pública la arbitrariedad que estaban cometiendo en contra de su familiar.

No es diferente la Fiscalía de Colima actual de la pasada; es la misma porquería ahora en manos de un sujeto incompetente, ruin, cobarde y patán que no hace su trabajo y que, por el contrario, protege a uno de los cárteles que dominan el territorio colimense, como bien lo señaló la Secretaría de la Defensa Nacional a través de los cables confidenciales hackeados por el grupo Guacamayas.

En cualquier otro lugar, una denuncia como la de Ana María Vera sería un escándalo que obligaría a las autoridades a aclarar el caso de la detención de su hija, la protesta de los organismos defensores de derechos humanos y activistas y, sobre todo, la cobertura permanente de los medios de comunicación, que lo mínimo que tendrían que estar haciendo es cuestionar a la gobernadora sobre lo que está haciendo su mini fiscal.

El problema es que, con la prensa vendida que tenemos, ni siquiera hay un reportero que aborde el tema en los Diálogos por la Transformación.

Así de jodidos estamos.