POR Jorge Octavio González
Karina Heredia Guzmán es una persona ambiciosa, cínica y traidora; es capaz de mostrar una cara para conseguir su objetivo y al día siguiente mostrar su verdadera personalidad y apuñalar por la espalda a quien en un principio la ayudó.
Por cuestiones que sólo Felipe Cruz Calvario debe explicar —su esposa, por cierto, siempre se lo reprochó—, el entonces presidente municipal de Villa de Álvarez la eligió como síndica en su planilla cuando competía por las siglas de Movimiento Ciudadano.
Ella se encargó de esparcir la especie de que, al concluir la administración de Cruz Calvario, sería la candidata de MC a la presidencia municipal de Villa de Álvarez.
La razón: el propio Felipe Cruz se lo habría prometido.
Con esa promesa, que nunca reconoció el ex alcalde villalvarense, Karina Heredia comenzó a comportarse como la única heredera del trono; manejaba la administración municipal como si fuera de su propiedad y trataba con la punta del pie a los empleados de la comuna.
La política, como nunca tiene nada definido, cambió las circunstancias para Karina Heredia: de lejos iba a ser la sucesora de Felipe Cruz por Movimiento Ciudadano; como premio de consolación Virgilio Mendoza le dio la candidatura por el Verde Ecologista.
Llegó como regidora, pero en sus planes estaba, de nueva cuenta, ser la candidata para cumplir su sueño de ser presidenta municipal.
A tal grado llegó su obsesión por el poder que tuvo que aliarse con uno de los políticos más corruptos y sucios de Villa de Álvarez: El Tecolín Memo Toscano, quien le ofreció ser su síndica en la planilla para competir por segunda ocasión por la presidencia municipal.
Pero ahora, ciertamente, Karina Heredia debía comprometerse a cuidar los intereses y los negocios de Toscano Reyes y sus financiadores a través de su cargo como regidora, comenzando por Héctor Michel Carrillo y su tío, el socio de Sergio Carmona El Rey del Huachicol, Mario Delgado Carrillo.
Y como amor con amor se paga, lo primero que hizo Karina Heredia en el Cabildo fue oponerse tajantemente a la instalación de tres gasolineras en Colinas del Rey, El Ángel y Punta Diamante, obvio del municipio de Villa de Álvarez.
Como no le funcionó su puesta en escena en la sesión de Cabildo de la semana pasada, aun cuando llevó a una señora que dijo representar los intereses de la colonia Colinas del Rey, el fin de semana se llevó a un grupo de vecinos identificados con ella y El Tecolín Memo Toscano para presionar a la administración municipal por el tema de las gasolineras.
Y como si no fuera suficiente la intromisión de Karina Heredia y Toscano Reyes en el asunto, con lo que la bandera ciudadana quedaba en un lugar secundario, acudió a la protesta Vladimir Parra Barragán y otras personas que se dicen activistas pero que recibieron el repudio y rechazo de la gente en las urnas el pasado 2 de junio.
El porro Para Barragán, tratando de mentir a la gente diciendo que iba en calidad de ciudadano y vecino de una de las colonias donde se instalarían las gasolineras, es el que menos autoridad tiene para cuestionar una administración que fue legitimada con los votos de la mayoría de los ciudadanos de Villa de Álvarez.
Él bien sabe que, como sucedió a nivel nacional, la gente depositó mayoritariamente el voto por MORENA para que haga los cambios que crean necesarios para continuar con lo que ellos llaman la transformación.
Vladimir Parra no puede objetar lo que una autoridad —que tuvo más de 7 mil votos de diferencia que la opción de MORENA— decidió de manera colegiada en el Cabildo Municipal, porque sería como regatearle al partido oficialista que ejerza su mayoría para aprobar las leyes e iniciativas que crean convenientes.
Ir con un grupo de vecinos, que no son la totalidad de quienes viven en las colonias en cuestión, no es la manera de presionar a la autoridad; la vía debía ser ganar el cargo a través del voto, pero El Tecolín Memo Toscano fue repudiado por la gente de Villa de Álvarez y prefirió darle continuidad al trabajo que se venía haciendo con la presidenta que ganó de manera abrumadora la reelección.
En la instalación de las gasolineras no hay nada oculto; como bien lo dijo la alcaldesa interina, todo es público y las sesiones se transmiten en tiempo real para que la gente esté informada de lo que hacen sus autoridades.
Si Karina Heredia, El Tecolín Memo Toscano y Vladimir Parra Barragán quieren cambiar las cosas deben, por principio de cuentas, ganarse la confianza de la sociedad para estar en los cargos donde se pueden hacer las modificaciones correspondientes a las leyes.
Así como la mayoría de los mexicanos eligieron que MORENA manejara el país e hiciera los cambios que deseen para el bien de la sociedad, así en Villa de Álvarez votaron por una mujer que se ganó la confianza de los villalvarenses por el trabajo realizado en estos tres años.
Tienen otra oportunidad dentro de tres años, en el 2027.