POR Luis Fernando Moreno Mayoral

No fue bien recibida por los porteños la pretensión de Gabriela Benavides Cobos de pelear por la candidatura del oficialismo a la presidencia municipal de Manzanillo en el 2027.
Y es que, de acuerdo a las versiones que se dieron a conocer hace unas semanas, en algunas encuestas de opinión se manejó el nombre de la senadora del Verde Ecologista como posible competidora a la alcaldía manzanillense.
No tardó mucho en dar una respuesta al respecto: sí quiere ser presidenta municipal de nueva cuenta.
Al margen de que en MORENA el único que suena para la candidatura a la alcaldía del puerto es el sangronazo Jorge Padilla Castillo, que en su soberbia sólo se codea con el medio que financia Grupo Hazesa —que tiene, a su vez, contratos millonarios en ASIPONA—, eso no significa que cualquiera pueda venir a aspirar a suceder a Rosi Bayardo.
En el PRIAN no hay, en estos momentos, liderazgos con suficiente fuerza y aceptación ciudadana como para ser competitivos en las elecciones venideras; de ahí que un sujeto en campaña eterna como el secretario de Turismo se crea con las ínfulas de ser el candidato del oficialismo.
Pero no la van a tener nada fácil: no porque en el PRI y en el PAN no haya nadie con fuerza electoral quiere decir que le van a dejar servida la mesa a MORENA y aliados.
En Movimiento Ciudadano, si saben elegir, podrían dar la sorpresa.
Pero Movimiento de Regeneración Nacional tiene un problema: Gaby Benavides, como buena alumna de Virgilio Mendoza Amescua, podría irse por la libre como candidata del Verde Ecologista a la presidencia municipal de Manzanillo.
A ella no le costó traicionar al PRI y a su compañero de fórmula en el 2018: una vez que llegó al Senado de la República con los votos del PVEM y del PRI, ni siquiera se inmutó cuando los primeros días se fue con la bancada mayoritaria para votar con ellos.
Gaby, como Virgilio, son profesionales de la traición; ahí le aprendieron muy bien a Nabor Ochoa López.
Pero que no quede duda que, si no es la candidata de una alianza de MORENA con el Verde Ecologista y el PT, Gaby Benavides será la abanderada del PVEM a la alcaldía de Manzanillo, sin importarle que, con ello, divida el voto del oficialismo y le dé una suerte de aire fresco a la oposición.
Virgilio Mendoza, si no es reconvenido a la de ya con los expedientes que hay en su contra, se creerá con la libertad de ir solo como candidato a la gubernatura o negociará con la oposición para enfrentar a MORENA.
Al final ya vimos que la lealtad no es el fuerte de Virgilio ni de Gaby Benavides.