POR PXPress
ALGO PASA EN LA FISCALÍA GENERAL DEL ESTADO de Colima que, ciertamente, no saben comunicar lo que sucede al interior de la corporación ni atajan a tiempo la desinformación que se genera en redes sociales sobre acontecimientos de alto perfil. Y es que, por supuesto, es muy fácil meter en el ciclo informativo del día a día fake news para que la narrativa se centre en el tema de interés para crear caos e indignación; el problema es que las autoridades colimenses no están preparadas ni tienen a personal capaz para hacer frente a ese tipo de situaciones. EL PRIMER EJEMPLO fue la noticia sobre el presunto asesinato de María del Carmen López, la mujer estadounidense secuestrada el pasado 9 de febrero en su domicilio de Pueblo Nuevo, Villa de Álvarez, del estado de Colima, por la que el Buró Federal de Investigación, FBI, ofrece la cantidad de 20 mil dólares por información que lleve a su localización. En la semana se publicó un trascendido en una cuenta de Facebook, con datos verosímiles, acerca del supuesto asesinato de la señora poco después de que la familia pagara el rescate, situación, añadieron en la nota, que la Fiscalía de Colima les ocultó para no generar más controversia sobre el caso. La información, según dijeron en el medio, “proporcionada por un investigador que participa en el caso”, exhibió la incompetencia del mini fiscal Bryan Alejandro García Ramírez, algo que no requiere la confirmación de ningún investigador; también comentaron que se ocultó el homicidio a la familia “para evitar que este caso se convierta en un escándalo internacional que afecte la imagen del gobierno de Indira Vizcaíno”. Como se dijo líneas arriba, todo se leía verosímil; sólo que había un pequeño problema: NO ERA CIERTO. Y eso lo corroboró la propia familia de María del Carmen López, que en sus redes sociales compartieron el desmentido de la Fiscalía General del Estado de Colima sobre el presunto asesinato de la señora. Nada más una cuestión: la Fiscalía de Colima emitió el comunicado horas después de que la noticia sobre el fallecimiento de la mujer estadounidense ya se había viralizado e, incluso, retomado por medios serios que sí tienen un responsable de sus publicaciones. El daño estaba hecho; la familia estaba destrozada por cómo se manejó la supuesta muerte de su madre y que las autoridades no pudieron detener sino hasta después de muchas horas. ¿En qué trabaja el mini fiscal que todo le sale mal? EL SEGUNDO CASO FUE el de la mujer policía levantada en la comunidad de Madrid, en el municipio de Tecomán. Se manejó en los medios de información, primeramente, que la mujer Blanca Ruelas había desaparecido en una parada de camión en el municipio tecomense, sin especificar que había sido secuestrada y que pertenecía a la corporación policiaca; solamente se limitaron a mencionar que no se supo nada de ella desde que estuvo esperando un camión que la llevaría a Colima. Minutos después se publicó que a una mujer policía la habían levantado en una parada de autobuses en una comunidad de Tecomán; no se dijo el nombre ni nada más, pero quedaba claro que se trababa de la misma persona. Cuando algunos medios completaron el rompecabezas y salieron a decir que Blanca Ruelas, la mujer reportada como desaparecida, era la misma policía levantada por un comando armado en Madrid, se intentó desmentir la especie de manera burda, descalificando al medio que reportaba el suceso. Horas más tarde, sin embargo, volvió a manejarse una información extraoficial de que a la mujer secuestrada por un grupo de sujetos armados ya la habían rescatado con vida en un impresionante operativo en donde participó la Guardia Nacional, la Secretaría de Marina, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Policía Estatal. De acuerdo a la información publicada en algunos medios, Blanca Ruelas era un elemento activo de la Policía Estatal y fue rescatada en la comunidad de Caleras; sin embargo, mencionaron que se desconoce quiénes fueron los sujetos que la secuestraron, mucho menos si hay algún detenido por este hecho. El ciclo de la noticia nació y murió en puros trascendidos en redes sociales, sin que autoridad alguna confirmara o desmintiera la información. La policía estatal fue levantada por un grupo armado en Madrid, pero después de un mega operativo se logró rescatar con vida en Caleras. Tan, tan. EL PROBLEMA, EN ESTE CASO, es que una vez más se vieron incapaces las autoridades para atajar la información que se generaba minuto a minuto en las redes sociales. Hasta el momento no hay un solo comunicado ni una voz de autoridad alguna que amplíe lo sucedido en Madrid, Tecomán, el día de ayer. Y es la Fiscalía General del Estado de Colima la entidad encargada de salvaguardar nuestra seguridad e investigar a quienes cometen delitos en la entidad.
AYER MISMO CIRCULÓ UN VIDEO en donde se ve a un sujeto en el suelo, después de que ciudadanos lo detuvieron y retuvieron por haber intentado robar una mototaxi. Luego de un interrogatorio de parte de la misma gente, de golpes que le proporcionaron y de un intento de linchamiento, se lo intentaron llevar en un auto. Todo eso sucedió sin que autoridad alguna estuviera presente. Así de eficientes son los policías municipales de Manzanillo, cuya jefa es Griselda Martínez Martínez.