En la PAE les llueve al contralmirante Benítez y a la Morgan

POR PXPress

LA COLUMNA Concierto Político de este miércoles, referente a la situación que se vive al interior de la Policía Auxiliar Estatal (PAE), generó varias reacciones entre gente que se ha visto afectada directamente por el ex director de esa corporación y por la coordinadora operativa, Francisco Benítez Mortera y Ana Gabriela Espinosa Morgan, respectivamente. Hay un testimonio, publicado entre los comentarios en la página PXPress, en los que se corrobora lo ya escrito e, incluso, hasta se aportan datos nuevos que resultan de interés general, razón por la cual les vamos a dar cabida en este espacio. Una persona inicia así su texto: “Toda y cada una de las palabras dichas sobre la sra. Morgan es verdad. Es una lástima de lo que hoy es la PAE”. Entrada en materia, la informante insiste en que la conocida como la Comandante Morgan tiene “a sus amiguis” con buenos cargos y presta a los elementos que tiene a su cargo a corporaciones o para actividades privadas “para beneficio y enriquecimiento propio”. Cuando esos elementos se enteran que hace su negocio, los amenaza y amedrenta para que no se metan donde no les importa. Lo delicado del asunto es que, según la denuncia, “promueve la violencia y el bullyn”, tanto ella como sus supervisoras que son incondicionales suyas. Del sueldo no hay mucho que agregar: sigue siendo el mismo desde el inicio de la PAE en 2017. A muchos no les aumentan desde entonces, por lo que “no hay oportunidad de crecimiento ni puedes dar tu opinión, ya que eso es merecedor de castigo”. Y aunque la coordinación dice que los elementos son malos e incompetentes, la realidad es que el problema es la cabeza. POR SU PARTE, otro lector nos informa que trabajó en tiempos del vicealmirante Benírez Mortera en la PAE como chofer, por lo que se enteró que a la Comandante Morgan el director le prestaba una camioneta para los mandados y hacer las compras. Al chofer le tocó hacerla de taxista para ir a recoger personal administrativo alcoholizados hasta las cachas a altas horas de la madrugada. Algunos de ellos andaban, incluso, uniformados. Relata ese ex trabajador: “En los últimos días el miserable Benítez Mortera me despidió”. Dice que estaba de vacaciones cuando se incapacitó, pero Benítez Mortera lo acusó de “que se estaba haciendo pendejo y que no estaba malo”; por tanto, como eso no era un juego, lo botó sin piedad alguna. A este respecto, el ahora ex director armó todo un teatro en contra del elemento despedido; entre otras cosas, lo acusó de no haber pasado los exámenes de control y confianza”, cosa totalmente falsa, como ahora se verá. Total: el vicealmirante le dijo que firmara su baja de manera voluntaria, pues más adelante lo volvería ayudar a reingresar. Tuvo que firmar: si no lo hacía, de todas formas lo darían de baja por supuestas faltas cometidas, de manera que aceptó. Pero asegura que, “gracias a Dios, fue lo mejor que hice”. En efecto: a las dos semanas se convirtió en policía municipal, pues checaron su estatus de C3 y resultó que sí estaba aprobado en los exámenes de control y confianza. Así, hoy gana más y está muy a gusto en su trabajo. POR ULTIMO, una funcionaria definió a la Comandante Morgan como “una bruja”, pues en el edificio en el que se encuentra a diario cambiaba a sus guardias, lo cual es un error muy grande, pues no se puede estar capacitando a cada rato al personal de la PAE por el puro hecho de que a los que ya conocen la rutina los cambien al siguiente día por los puros pantalones de la coordinadora operativa. Por fortuna, dice que el nuevo director es diferente que el anterior, por lo que lo único que pide es que se le dé el beneficio de la duda. Y tan-tan.