POR PXPress
LA INSEGURIDAD SIGUE EN AUMENTO por más que el discurso oficial diga lo contrario. Asesinatos a plena luz del día, feminicidios, robos a negocios y a transeúntes con lujo de violencia lo vemos todos los días sin que se capturen a los responsables. A eso hay que agregarle el secuestro de una ciudadana americana en territorio colimense y una masacre en contra de unos ancianos en el municipio de Tecomán. EL PRIMERO, EL DE LA SEÑORA María del Carmen López, es un asunto que trascenderá la política colimense, ahora que la situación con los Estados Unidos no es la mejor. Resulta y resalta que, desde el pasado 9 de febrero, unos sujetos encapuchados llegaron al domicilio de la señora y, después de un intercambio de palabras, se la llevaron. A más de un mes del levantón, sin respuesta favorable de la Fiscalía General del Estado de Colima, su hija Zonia López decidió alzar la voz y dio a conocer el hecho a los medios de comunicación. Paralelamente, el FBI emitió una ficha donde se pide información acerca del paradero de la señora, que tiene ciudadanía estadounidense. Una vez que el asunto se hizo público, cuando también estaba caliente el tema de los 4 ciudadanos americanos que secuestraron en Tamaulipas y que finalmente pudieron rescatar a dos, las autoridades en Colima salieron a dar un posicionamiento. El mini fiscal Bryant Alejandro García Ramírez, con todo el cinismo del mundo, publicó en la cuenta de Facebook de la FGE que el fin de semana pasado, cuando habrían ya transcurrido más de 37 días del secuestro de la señora, “se reunió hace unos momentos con la Secretaria General de Gobierno, Guadalupe Solís, donde estuvieron dando seguimiento al caso de María del Carmen López, teniendo una conversación con sus familiares, reiterándoles todo el apoyo y dando a conocer el trabajo coordinado que se tiene con la FEMDO, de la Fiscalía General de la República, donde además le solicitaron a esa instancia federal, que atrajo y encabeza esta investigación, que les informen todas las acciones realizadas y los avances en la investigación”. Sin omitir que la redacción es pésima y denigrante para una institución que debe tener a los mejores en sus áreas, lo dicho por el mini fiscal es prácticamente lo mismo que salió a decir la secretaria general de Gobierno: “Acordamos que solicitaríamos a esta instancia federal que también les detalle todas las acciones realizadas y los avances de la investigación”, fue parte medular de lo que escribió en su cuenta de redes sociales. Ni las formas cuidan. EL SEGUNDO CASO ES EL DE LOS ancianos en Tecomán, acribillados por unos sujetos que venían persiguiendo a otro y que tuvieron la mala suerte de estar en el lugar y en el momento equivocados. Los adultos mayores, ciertamente, eran inocentes y son daños colaterales en esta cruenta guerra entre organizaciones criminales. Lo lamentable, en todo caso, es la versión que pretendieron dar a las pocas horas de la masacre. De acuerdo a la narrativa de las autoridades, difundida en redes sociales por sus matraqueros a sueldo, los señores acribillados afuera de un domicilio no eran inocentes porque el ataque fue directo. Así es: la misma narrativa del oscuro y siniestro Gustavo Joya Cervera. Tan inverosímil fue la versión oficial de lo sucedido en el municipio de Tecomán, que la gente comenzó a burlarse de ellos y se preguntaron si, en efecto, el ataque fue directo y los ancianos pertenecían a un grupo delincuencial, entonces al perro de nombre Canelo, que recibió un disparo en la pata, también era parte de un grupo criminal. Porque en las redes sociales trascendió cómo se llevaron al perro a un veterinario que lo valoró y determinó que tendrían que ingresarlo a cirugía para que no se complicara su estado de salud. Afortunadamente, todo salió bien; la operación salió en poco más de 8 mil pesos, que se juntaron gracias a la cooperación de los ciudadanos que siguieron el caso de cerca. Lamentable, por supuesto, que no pudieron hacer lo mismo con los dos ancianos que, en un fin de semana largo, nunca se imaginaron que el sábado 18 de marzo sería su último día en este mundo…
TAN ASUSTADO ESTÁ EL DIRECTOR general de Ciapacov en Colima por todos los señalamientos de organismos de partido y de derechos humanos sobre su responsabilidad en la agresión de mujeres, que busca por todos los medios tratar de mantenerse en el cargo. Vladimir Parra puede ir a buscar desesperadamente a Jesús Ramírez Cuevas, el vocero de la presidencia de la República, así como a Arnoldo Vizcaíno Rodríguez, y decirle que su hija es la mejor de todas; lo que jamás podrá borrar de su historial público es su misoginia, las amenazas a mujeres y el trato despótico que les hizo, según quedó acreditado en la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia del CEN de MORENA y en la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Colima. Podrá ser sostenido en un gobierno que se dice feminista, pero las acusaciones en su contra lo seguirán en toda su carrera política. Y eso no lo podrá borrar por más medios de comunicación que pague con el dinero de la Ciapacov.