POR Bibiano Moreno Montes de Oca
En MC: gobiernos abusivos y aliados de MORENA
El Movimiento Ciudadano (MC), juguete del calvito veracruzano Dante Delgado, ha logrado la hazaña de obtener el poder –triunfo indiscutible— en dos de los estados más ricos y prósperos del país con el pelón Enrique Alfaro Ramírez y el quijarudo Samuel García, de Jalisco y Nuevo León, respectivamente. Igual que otros gobernadores, los dos mencionados son políticamente correctos: aparentan ser opositores en su ausencia, pero frente a amlo son dóciles, mansos y hasta arrastrados. Claro: es la práctica política del veracruzano dueño de la franquicia, cuyo comportamiento es de puta fina: es cara, sí, pero no deja de ser puta.
Como tal, la prostituta Dante Delgado se comporta en el escenario político con miras a la sucesión presidencial de 2024: venderá su amor muy caro… al que ofrezca más. Así, con sus veleidades, el MC le hace el juego a Morena, si bien hace creer que se maneja de forma independiente. En la Alianza Va por México (integrado por PRI, PAN y PRD) se han cansado de invitarlo a unir fuerzas para hacerle frente común a la aplanadora que empleará Morena con sus aliados (PT, PVEM y Panal, en principio), a fin de poder sostenerse en el poder por un sexenio más con alguna de las conocidas corcholatas de amlo.
Como buena piruja a la caza de un rico ingenuo, el MC de Dante Delgado asegura que no quiere ir junto “con los que ya han defraudado a la población” (se entiende que se refiere a los gobiernos prianistas), como si el partido naranja fuera un dechado de virtudes y ejemplo a seguir con sus gobernantes honestos, rectos, decentes, abnegados y entregados al pueblo bueno y sabio. Sí, en efecto, como el prepotente y arbitrario pelón Alfie, peleando como vil pandillero con las autoridades de la Universidad de Guadalajara, así como al quijarudo Samy, declarando que los problemas del agua de su entidad no son de su competencia, para darnos cuenta de la clase de basura que pueden ser también los gobernadores emecistas.
En Colima, por ejemplo, acabamos de pasar por la amarga experiencia de un alcalde de la capital del estado, el locochón de Locho Morán Sánchez, que es la prueba irrefutable de que en el MC abundan los detestables ejemplares políticos que pueden encontrarse en cualquier partido; en especial, en la secta morenaca. Así, tomando de referentes al pelón Alfie y al quijarudo Samy, el locochón de Locho Morán actúa de manera frívola, irresponsable y valemadrista con su pitero recorrido dizque por el mundo, a pesar de haber dejado a la administración municipal con una deuda de 60 millones de pesos por falta de pagos, lo mismo al IPECOL que al IMSS.
El veracruzano Dante Delgado se entretiene con su juego de hacerle al listo, pues al prácticamente cerrar la posibilidad de hacer causa común con la Alianza de Va por México, deja abierta la ventana para, en descarado amasiato, entregarse por completo a amlo. No es necesario que el MC se una al partido de los nuevos ricos de la política mexicana para que un presidente morenaco refrende el triunfo en las urnas en el 2024: bastará simplemente con que vaya solo para perder, desviando de esa manera los votos que pudieran permitirle al PRI, al PAN y al PRD echar a patadas a Morena de Palacio Nacional.
La sucia práctica de disimular ser opositor de Morena, desalentando a la Alianza de Va por México y coqueteando con amlo para sacar el mejor provecho posible en 2024 (como buena puta cara, pues al final de cuentas el MC jamás obtendrá por sí solo la presidencia de México), es la misma que en lo local lleva a cabo Locho Morán: implacable en la campaña en contra de Indira Vizcaíno Silva, a la sazón candidata morenaca a la gubernatura del estado; sin embargo, ya con la Indi en el poder, sumiso, agachón, obsequioso y deliciosamente galante con la mujer, como corresponde a un converso de la secta cuatrotera.
Por ello, no faltan los que dicen a los aliancistas –y tienen razón— que ya no le anden rogando a Dante Delgado para armar un frente común por la presidencia de la República en el 2024. Ni caso tiene: es una piruja vendiéndose muy cara. Y lo mismo hará Locho Morán con Morena en Colima, si no es que antes echan a ese vividor a bastonazos en las costillas del Movimiento Ciudadano.