POR Bibiano Moreno Montes de Oca
La posición que pelearán Arnoldo, Virgilio y la Gris
Las elecciones del 2024 serán muy complicadas para el partido de los nuevos ricos que actualmente está en el poder, pues su desgaste es evidente. En Colima, pese a que en estos momentos el indirato no llega ni al año de haber sacado al PRI del poder, la gente ya se encuentra hasta la madre de la Gobernadora Altozano y de su chiquigabinete de vacilada, inútil y omiso, pero con salarios que no tiene ni Obama. Así, en cuanto a las elecciones locales, a Morena no le pinta nada bien el panorama, pues el lastre que representa Indira Vizcaíno Silva va a terminar por hundir a sus candidatos.
En 2024 se elige la fórmula de candidatos al Senado de la República, amén de presidente de la República, diputados federales (dos), presidentes municipales (10) y diputados locales (16 distritos). En lo local, el de senador es el cargo más apetecido por los aspirantes. Por tal razón, hacia esa posición levantan sus ojos anhelantes personajes impresentables (de Morena y sus aliados de ocasión) como Arnoldo Vizcaíno Rodríguez, gobernador de facto de Colima; Virgilio Mendoza Amezcua, dueño del PVEM estatal, así como la mazorquera y reiterativa Gris Celda Martínez Martínez, presidenta municipal de Manzanillo.
La integración de la fórmula al Senado de la República va a ser causa de los peores enfrentamientos entre los aspirantes morenacos y partidos satélites, pues todos se creen con derechos e invocan a amistades al más alto nivel que les habrán de dar el visto bueno para que salgan avante. La posición, la más alta que estará en disputa a nivel estatal dentro de dos años, estará muy reñida no sólo por el hecho de que es una importante plataforma para proyectos políticos a mediano plazo, sino porque habrá que ver quién queda en el primer lugar y quién en el segundo de los aspirantes a ese cargo de elección popular.
A ver: no es ninguna garantía ir en el segundo lugar de la fórmula, así sea el partido de los nuevos ricos. Como ya lo he dicho, el desgaste cuatrotero en Colima fue muy rápido, de ahí que el hecho de estar Morena en el poder no es garantía de triunfo. Si la fórmula completa pierde frente a otro partido o alianza –que es casi un hecho—, el único que podrá acceder a una mullida curul en el Senado de la República será el que se encuentre en el primer lugar. El que vaya en segundo lugar, aunque se sienta con la posición en la bolsa, recibirá un tremendo patadón. El primero, por la votación obtenida, se salvará; el segundo, repito, no.
Así, pues, aquí es donde los puristas de la lengua dicen que la puerca tuerce el rabo. Sí, en efecto, porque lo mismo el vejete cacique arrocero de Buenavista, la primitiva Gris Celda Martínez o el cachetón del puro verde ecologista van a tratar de apuntarse en el primer lugar pues, en los hechos, será la única posición segura para Morena y sus partidos compinches. A lo anterior hay que agregarle la vacilada de la paridad de género, es decir, que en algunos casos las posiciones les corresponden a las mujeres abnegadas, divinas, emancipadas y empoderadas, lo que pondrá en franca desventaja a los varones.
Pongamos por ejemplo a la alcalde porteña: por ser mujer, podría ser la que vaya en primer lugar de la fórmula; por tanto, sería la única con la posición segura. Si en la segunda posición va el viejo padre de la gobernadora, ya estuvo que el ruco bailará las calmadas. Bien mirado, la fórmula podría verse pegadora, pero ya no a estas alturas del partido, cuando todo mundo en Colima ya los vomita por todos los abusos y atropellos de cada uno de los dos en su respectivo ámbito. Con la inclusión de Virgilio, en lugar del viejón, no mejorarían mucho las cosas, si bien es cierto que es más competitivo que el papito de Indira.
Hay que destacar que, a cuál más, todos alegan estar bien apadrinados: la Gris Celda Martínez tiene buenos contactos en la capital del país, de ahí que haya podido lograr la reelección en la alcaldía en 2021, a pesar de que los planes de Indira Vizcaíno para Manzanillo eran otros. El gobernador de facto de Colima se siente con derecho divino por ser padre de la gobernadora y por ser cercano del vetusto inquilino de Palacio Nacional, algo que puede ser cierto, pero que a amlo no le preocupa: él es leal a sí mismo. En cuanto a Virgilio Mendoza, su puntal en la Ciudad de México es el poderoso senador Manuel Velasco Coello.
Como sea, entre ellos no se van a poner de acuerdo, pues al sentirse divas de la política todos ellos, ninguno cederá ni un ápice ante las pretensiones de los otros. O sea: el pronóstico es que la disputa por el primer lugar de la fórmula al Senado de la República va ser el escenario de una auténtica carnicería. Así, a pesar de ir apuntalados por el partido en el poder, pero totalmente desacreditado por su creciente mala fama, va a sumar también que el candidato, cualquiera que sea el que vaya en primer lugar, contarán con su propio negro historial que hará las delicias de columnistas, periodistas y opinadores en general.