Chuy Dueñas: un lambiscón encumbrado

POR Luis Fernando Moreno Mayoral

José de Jesús Dueñas García, alias Chuy Dueñas, es un sujeto que siempre ha estado en cargos burocráticos en el PRI y en el gobierno del Estado y los ha pasado sin pena ni gloria; los puestos los ha obtenido más por compromisos personales con funcionarios de primer nivel que por capacidad.

En el sexenio de José Ignacio Peralta Sánchez, por ejemplo, nunca quedó fuera de la nómina: del 16 de enero del 2016 al 31 de mayo del 2017 fue director de Participación Juvenil en la Secretaría de la Juventud; del 1 de junio de 2017 al 15 de mayo de 2019 fue asesor en el Despacho del Gobernador; y del 16 de mayo del 2019 al 15 de marzo del 2021 se desempeñó como director general del Instituto Colimense para la Discapacidad.

Chuy Dueñas, como se puede apreciar, no dejó pasar ni siquiera un día para brincar de cargo cada que se hacían cambios en la administración estatal; a él jamás le perjudicó la quiebra financiera que dejó a miles de trabajadores sin su salario, sin servicios de salud y sin dinero para pagar sus deudas.

El, después de su última responsabilidad al frente del Instituto Colimense para la Discapacidad, se fue de candidato a la diputación local por el distrito VII. La quiebra financiera se anunció a finales del mes de julio del 2021, justo cuando acababa de pasar la elección constitucional. ¿Coincidencia? ¿Parte de los recursos se fueron a las campañas de, por ejemplo, Chuy Dueñas?

Porque hasta el momento no hay explicación seria y convincente de cómo es que José de Jesús Dueñas García, siendo un funcionario del montón y nada brillante de la administración de Peralta Sánchez, logró ganar la diputación local a Mayrén Polanco Gaytán, de Movimiento Ciudadano, y a Blanca Livier Rodríguez Osorio, de MORENA.

Mayrén Polanco también fue funcionaria de Ignacio Peralta y siempre estuvo en cargos importantes; al menos era conocida y tenía más trayectoria. Blanca Livier Rodríguez buscaba su reelección en el Congreso del Estado nada más y nada menos que por Movimiento de Regeneración Nacional, con la ola de Indira Vizcaíno a su favor y todo el dinero y apoyo federal a su disposición. ¿Y quien resultó ganador fue Chuy Dueñas? Algo no cuadra.

En la sesión del pasado miércoles 24 de agosto, el diputado Chuy Dueñas pidió el uso de la voz para subir a tribuna a exponer sus puntos de vista sobre algunos temas de interés para Colima. ¿Acaso habló de la reciente detención de José Bernabé Brizuela alias La Vaca y la ola de violencia y terror que trajo consigo su captura por la Secretaría de la Defensa Nacional y la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México? ¿Le reclamó a la gobernadora que su estrategia de seguridad y contención ante los previsibles ataques del cártel de Los Mezcales no funcionó para nada y que debería replantearse otra? ¿Fue enérgico en sus cuestionamientos? ¿No? ¿Ni siquiera eso?

¿Entonces qué fue lo que dijo en tribuna el mejor amigo del júnior Enrique de la Madrid? Nomás no se rían; ahí va: subió a tribuna a explicar por qué iba a votar en contra del dictamen presentado por el diputado Alfredo Álvarez, de MORENA, mediante el que se declara el 29 de septiembre de cada año como el Día Estatal del Maíz. En serio: no se rían. De pena ajena, ¿verdad? ¡Explicar por qué no votar por el Día Estatal del Maíz! ¿Es neta?

La otra puntada, puesto que nuestra columna estelar Xpress´o nos comprometió a profundizar un poco más, fue para reclamar a la diputada Andrea Naranjo Alcaraz por qué su iniciativa de “animales de compañía” no se ha dictaminado y la de ella sí.

La legisladora de MORENA presentó un dictamen relativo a reformar, adicionar y derogar diversas disposiciones de la Ley para la Protección de los Animales del Estado de Colima, con el fin de fomentar el trato digno y respetuoso a las especies animales, con el propósito de evitar la crueldad en contra de estas.

Chuy Dueñas, celoso porque el dictamen de la diputada que funge este mes como presidenta de la Mesa Directiva del Congreso del Estado fue votado y aprobado, reclamó airadamente que su iniciativa para garantizar los derechos de los “animales de compañía” lleva 64 días sin dictaminar.

La respuesta que recibió lo dejó más que noqueado: resulta que el dictamen de Andrea Naranjo sólo fue una armonización de una ley federal, en tanto que la de Chuy Dueñas requiere información que tienen que proporcionar los ayuntamientos (lo que no han hecho) porque su implementación necesita que destinen recursos económicos que no están presupuestados este año. ¡Ignorante!

El último tema fue el relativo al dictamen de la diputada Isamar Ramírez, mediante el que se nombra el 25 de septiembre de cada año como el “Día Estatal de las Personas Sordas y de su Lengua de Señas Mexicana”. José de Jesús Dueñas García, protagónico como es, recordó que ya se había aprobado un dictamen para que las sesiones contaran con una persona intérprete de lengua de señas mexicanas, lo que, dijo, hasta el momento no se ha llevado a cabo.

Mientras decía eso, a su lado estaba justamente una señora que estaba haciendo la labor de interpretar el lenguaje en señas mexicanas; ni siquiera propuso que mientras se abría la plaza para ese trabajo pagaría el sueldo de la intérprete con su dieta.

Y no debería serle de mucho problema destinar parte de su sueldo para tal fin: de acuerdo a la información pública disponible, el total de ingresos anuales netos percibidos por Chuy Dueñas y su esposa es de 746 mil 8 pesos. Y cuando salga de la Legislatura habrán percibido 2 millones 238 mil 24 pesos. Nomás.

CONTINUARÁ…