POR Jorge Octavio González
El Ave Azul es una estrategia del Partido Acción Nacional que consiste, durante las campañas electorales, en crear libelos difamatorios y destruir reputaciones para debilitar a los candidatos del partido oficialista
Hoy, muchos de los priístas que se dan abrazos y caminan de la mano con los panistas, fueron víctimas de ese tipo de herramientas que, sin embargo, parece que continúan bajo ese membrete llamado Secretaría de Acción Juvenil.
Con el nepotismo como práctica común en la dirigencia actual de Acción Nacional, la dichosa cartera juvenil es dirigida por nada más y nada menos que la hija de Julia Jiménez Angulo y también directora de Ecología y Medio Ambiente del ayuntamiento de Colima.
Nirvana Rocha Jiménez, sin rubor alguno, permaneció en la misma dirección en la pasada administración, pese a que ya estaba operando a favor de Riult Rivera para ganar la presidencia municipal de Colima; hoy está a sus anchas con doble cartera y sin cumplir con ninguna de sus responsabilidades.
Pero eso ya viene de familia: Julia Jiménez es la dirigente estatal del PAN en Colima y, a su vez, diputada federal por la vía plurinominal; en algún momento intentó asumir la secretaría del ayuntamiento de Colima para que su hija arribara al Congreso de la Unión, pero se le atravesó Mario Anguiano Moreno para imponer al corrupatazo Francisco Ánzar Herrera.
Riult Rivera, por cierto, sigue sin cumplirle a Crispín Guerra Cárdenas la chamba prometida tras la derrota en su búsqueda por la diputación federal por el Distrito I.
En la Secretaría de Acción Juvenil, sin embargo, Nirvana Rocha Jiménez tiene a su servicio a adolescentes y jóvenes que se creen influencers y actores y se dedican a denigrar a los medios que cuestionan al presidente municipal de Colima y a sus funcionarios.
Recientemente su activismo se dio a conocer cuando en PXPress se exhibió a la farsante intérprete de lenguaje de señas mexicana a través de las cartas que organizaciones locales y nacionales de sordos enviaron a la Jefatura de Educación Especial de la SEP para informarles sobre la pésima estrategia que estaban implementando en materia de educación especial.
Operaron desde el búnker de Mario Anguiano Moreno para pedirle a los beneficiarios de becas y favores personales que utilizaran sus perfiles de redes sociales para redactar mensajes a favor de la usurpadora de funciones y, de paso, críticas a este medio por difundir las denuncias que personas con discapacidad nos hicieron llegar sobre esta persona.
Uno de los más entusiastas defensores de la intérprete de lenguaje de señas, que está al servicio de Nirvana Rocha y actúa pésimamente en videos que publican las redes del ayuntamiento de Colima, es un sujeto llamado Damián Aguirre Barajas.
Aunque ni en su casa lo conocen, el tipo forma parte de la Secretaría de Acción Juvenil y es muy cercano a Nirvana Rocha; lo peor es que su defensa a Riult Rivera la inició llamando a la mandataria estatal “coli gobernadora coli asesina”, exhibiendo sus impulsos y emociones inmaduros para salir en defensa de su amado jefe.
Riult Rivera, como lo hemos dicho en otras ocasiones, tiene a su servicio a reporteros domesticados que, desde sus respectivos medios de comunicación, se dedican a golpear a la gobernadora del Estado, a la presidenta municipal de Manzanillo y a su competencia interna en la alianza PRIAN, creando perfiles falsos en WhatsApp para calumniar a la presidenta municipal de Villa de Álvarez.
Las tripas arrojadas por Armando Aguirre en contra de la mandataria es un claro ejemplo de que hay una línea desde la dirigencia estatal del PAN, acuerpada por la Secretaría de Acción Juvenil, para criticar al gobierno del Estado y a los contrincantes de Riult Rivera en la alianza del PRI y el PAN con miras al 2027.
No por nada el CDE del PAN tuvo que ser reforzado por un orangután que grita y manotea en tribuna como Jesús Alberto Partida Valencia, el diputado plurinominal que entró al Congreso del Estado mediante un fraude orquestado por su comadre Julia Jiménez, que lo puso en el primer lugar de la lista como parte de la diversidad sexual sin serlo ni acreditarlo.
Ya de por sí es delicado que Riult Rivera tenga a reporteros domesticados para golpear al gobierno del Estado y a presidentas municipales a las que teme; lo que de plano rebasa cualquier límite es que tenga en la dirigencia estatal del PAN, concretamente en la cartera de Acción Juvenil, a personeros que se dedican a difamar a todo aquel que cuestione al presidente municipal de Colima y a sus cercanos.
Riult Rivera, como oposición, tiene todo el derecho a cuestionar a quien quiera del oficialismo, como lo hace su amigo del alma Beto Partido; el problema es que el alcalde capitalino ha negado una y mil veces que su estilo sea de confrontación y golpeteo y en todo momento dice que él es hombre de trabajo en equipo y en unidad.
Pero el presidente municipal gusta de mentir como un mitómano: mintió cuando negó haber golpeado a la madre de sus hijos, mintió cuando dijo que no pediría un crédito para pagar los compromisos de fin de año (del 2024), mintió sobre que capacitaría a elementos de tránsito y vialidad y a policías y mintió cuando dijo que trabajaría de manera coordinada con el gobierno del Estado y el federal.
En los hechos, por supuesto, se ha dedicado él y su gente —los reporteros domesticados y funcionarios de la dirigencia del PAN—a golpear a la gobernadora y a la presidenta municipal de La Villa, a ésta para mantenerla fuera de la competencia interna del PRIAN por la candidatura a la gubernatura en el 2027.
Riult Rivera es lo que es: un vulgar ambicioso de poder que pretende ser el candidato a gobernador a costa de lo que sea, pasando por encima de quien sea y sin importar que tenga que traicionar a quienes le tendieron la mano cuando lo necesitó.