POR Jorge Octavio González
La supuesta renuncia de Margarita Moreno al PRI el pasado 13 de abril del 2023 ha dado pie para que el exgobernador Fernando Moreno Peña y los sicarios a sueldo de Riult Rivera le den rienda suelta a su machismo y terminen por darle la razón a la presidenta municipal de Colima.
Todo el día de ayer las redes sociales se inundaron de insultos misóginos y descalificaciones que encajan en la violencia de género en contra de una mujer que lo único que hizo fue denunciar que un grupo de hombres, enquistados en las decisiones políticas de Colima desde hace 50 años, la están violentando y obstaculizando para avanzar en su carrera política.
Moreno Peña, anclado en el pasado que tanto añora, fue capaz de asegurar (él, que dice tener pruebas y fuentes fidedignas de lo que dice en público) que la alcaldesa de Colima falsificó una renuncia para tener sus derechos políticos a salvo para reelegirse sin contar con el registro del Revolucionario Institucional.
Y es que, si hacemos memoria, en la Universidad de Colima, cuando el grupo de porros que hoy están en la senectud se apropiaron de la institución educativa, era común desaparecer expedientes de alumnos que levantaban la voz ante las irregularidades y el robo en despoblado que había en la casa de estudios.
Títulos de licenciatura en Derecho también se conseguían para poder acceder a cargos que requerían el grado académico; de todo eso se vieron beneficiados en el Grupo Universidad.
FMP cree que todos son de su condición: no puede aceptar que se les haya ido a sus informantes en las instituciones del Estado la renuncia de Margarita al tricolor para poder jugar la reelección en el 2024.
¿Recuerdan quién tiene la tecnología para intervenir llamadas telefónicas? Exacto.
¿Falsificar un documento de renuncia al PRI?
De Fernando Moreno Peña no se extraña que exhiba su misoginia y saque sus demonios ante la opinión pública; de acuerdo a su personalidad pendenciera y rijosa, se estaba tardando.
Del que sí extraña es de Arnoldo Ochoa González, uno de los que se vieron perjudicados cuando Humberto Silva Ochoa se decidió por Moreno Peña para sucederlo en la rectoría de la Universidad de Colima; el que sí sabe de qué es capaz ese corrupto ex mandatario es precisamente el actual dirigente del PRI en Colima, por lo que no se entiende por qué es tan consecuente con él.
Y es que, tras ser cuestionado respecto a la renuncia de Margarita Moreno y las acusaciones que hizo a miembros distinguidos del PRI sobre violencia política de género, Ochoa González repitió el mismo guion que el ex gobernador; era como si se hubieran puesto de acuerdo para decir lo mismo cuando salieron a los medios de comunicación.
Ahora se entiende por qué, sin tener un cargo dentro de CDE del PRI en Colima, Fernando Moreno Peña acude a las reuniones privadas con el dirigente del Revolucionario Institucional a nivel nacional y decide o veta candidaturas de acuerdo a sus intereses personales.
Que AOG se vea en el espejo de Humberto Silva: el mentor, el que les enseñó todo lo que saben, el que tuvo que decidirse por Moreno Peña en lugar de él para que dirigiera la Universidad de Colima, al final fue traicionado de la peor manera y fue víctima de una guerra de calumnias por su pupilo.
Arnoldo Ochoa ya está demasiado grandecito como para saber qué es lo que le espera; allá él si permite que también le claven la puñalada como a Silva Ochoa.
De Riult Rivera y su obsesión por ser candidato del PRI y PAN a la alcaldía de Colima, cuando tiene cero posibilidades de ganar, hablaremos más delante.