Reclaman a Indira su falta de palabra con pensionados y jubilados

POR Jorge Octavio González

Ayer, en el show de stand up de la mandataria, los chicos de comunicación social no se dieron abasto cuando un centenar de pensionados y jubilados inundaron de reclamos las cuentas oficiales del gobierno del Estado por la falta de pago del fondo de retiro del 2021.

Indira Vizcaíno, como ya se ha relatado en estas páginas, estuvo de acuerdo e informada acerca de la negativa del gobierno federal a prestar dinero a José Ignacio Peralta Sánchez para hacer frente a los compromisos del final de su administración.

Con tal de golpear a Peralta Sánchez y al PRI, y sobre todo que la sociedad colimense los terminara odiando, AMLO e Indira fueron capaces de dejar sin recursos al gobierno del Estado, creyendo que con eso afectarían la economía del ex gobernador y lo harían perder el sueño y sufriría de ansiedad; en el fondo, a quienes realmente perjudicó fue a los miles de trabajadores que se quedaron sin servicios médicos, sin dinero para la renta, se endeudaron hasta el cuello, y otros, lamentablemente, perdieron la vida.

A esa campaña sucia se sumó el rector de la Universidad de Colima, Christian Torres Ortiz Zermeño, quien, queriendo quedar bien con la nueva gobernadora, traicionó a Ignacio Peralta y lo cuestionó con desplegados y declaraciones públicas, además de interponer denuncias en su contra en la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción y el Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización Gubernamental del Estado de Colima, Osafig, por no pagar lo correspondiente a la casa de estudios.

Al margen de que la historia juzgará el papel servil y miserable que jugó el rector de la U de C en esos momentos álgidos que atravesó la entidad (más claro: como el enano que es), poco a poco se estarán desvelando los acuerdos que en conjunto tomaron para generar la crisis que tuvo como único responsable a Ignacio Peralta.

Sobre el tema que nos ocupa, el de la falta de pago del fondo de retiro a los jubilados y pensionados del gobierno del Estado, en el programa de entretenimiento de la gobernadora Indira Vizcaíno se hizo el reclamo de decenas y decenas de ellos.

Indira Vizcaíno tiene una obsesión con José Ignacio Peralta, pese a que hay algo que los unirá para toda la vida, por lo que el fondo de retiro que no ha pagado es porque cree que todos los que se pensionaron y jubilaron en el 2021 se lo deben al ex gobernador; lo cierto es que todos ellos cumplieron sus años de servicio al frente de la administración y tenían todo el derecho de pasar al retiro.

La gobernadora cree que, con no pagar el fondo de retiro a los jubilados y pensionados del 2021, hace sufrir a Ignacio Peralta. Tanta obsesión es enfermiza. Peralta Sánchez ya no está en Colima y es probable que no pise tierras colimotas en varios años; a los que sí perjudica con su actitud de niña berrinchuda es a los cientos de ex trabajadores que en las cuentas oficiales del gobierno del Estado estuvieron plasmando sus reclamos sobre ese recurso que debió llegarles hace dos años.

Martín Flores Castañeda ya fue timado una ocasión por Indira Vizcaíno el día de su Primer Informe de Gobierno: fue llevado a Casa de Gobierno, donde estuvo el secretario de Gobernación Adán Augusto López Hernández, e hicieron algunos compromisos para comenzar a pagar lo adeudado. Indira Vizcaíno dio su Informe tranquilamente; después se olvidó de los trabajadores y su compromiso y se fue de vacaciones.

Hace unas semanas, el líder sindical informó que se había acordado en el Consejo de Administración de IPECOL interponer una denuncia contra Indira Vizcaíno para obligarla a pagar; sin embargo, dijo que la secretaria de Planeación, Finanzas y Administración, Fabiola Verduzco Aparicio, fue a pedirles que pararan el procedimiento porque pagarían.

¿Qué creen que sucedió? NO pagaron. Y Martín Flores dijo que, como ellos incumplieron con su parte, ya no había acuerdo que valiera, por lo que iban a continuar las denuncias.

Ha quedado bastante claro que Indira Vizcaíno, pese a decirse venir de la lucha de izquierda, no le importa la suerte de los trabajadores, no le importa si viven o mueren, no le importa pagar adeudos que no son de su administración (ignora que los adeudos son institucionales, además de que ella debe más de 400 millones de las aportaciones patronales al IPECOL), y cree que puede jugarle el dedo en la boca al líder sindical y a los miles de trabajadores del gobierno del Estado.

En el 2024 verá que no es así.

Indira es una mitómana que sólo se quiere a ella misma.