POR Jorge Octavio González
Indira Vizcaíno ha demostrado ser una mitómana profesional: miente como respira. Y lo sabe. Y no le importa. Y le vale.
Y es que, de acuerdo a su último show de stand up de esta semana, justo el Día de la Libertad de Expresión, la gobernadora arremetió furiosa, con su ceja alzada de María Félix, en contra de un reportero que la cuestionó acerca de las protestas que se están haciendo en contra de funcionarios de su administración.
La gobernadora autodenominada feminista, que ya vimos que es la más machista de todas, ni siquiera tenía conocimiento de que una maestra llevaba más de un mes protestando por ser víctima de acoso laboral en su centro de trabajo.
Pese a las burlas que le hacen y la presión a que está sometida por parte de las autoridades de la Secretaría de Educación y Cultura, la profesora se mantiene firme en su protesta, mientras Indira Vizcaíno ignoraba la situación y, como es costumbre, se desentendía del problema.
Una mujer lleva más de un mes en pie de lucha y denunciando acoso laboral y la gobernadora no lo sabía. Increíble.
También habló sobre la manifestación del gremio magisterial en contra de un funcionario soberbio, prepotente y patán como Omar López, director de Secundarias de la SEyC, quien desde el inicio de la administración ha sido un dolor de cabeza para los maestros y la dirigencia sindical, pero al que han protegido hasta la ignominia por ser parte de su movimiento obradorista.
Lo peor que pudo hacer Indira Vizcaíno, ante los planteamientos que se le hicieron sobre estos dos asuntos que tienen que ver con el magisterio, es minimizarlo; decir que tanto la protesta de la maestra como la manifestación de los profesores contra Omar López se entiende como parte del relevo sindical que se está viviendo en estos momentos es, por decir lo menos, insultar la inteligencia de la gente.
Para la mandataria estatal las protestas de una mujer y de un grupo de maestros en contra de un funcionario no son genuinas, sino que tiene que haber un trasfondo político; en este caso la renovación de la dirigencia de la sección 6 del SNTE en Colima.
Indira Vizcaíno miente porque, aunque dijo desconocer la protesta de una mujer que denuncia acoso laboral desde hace un mes, señaló que todo está relacionado con el relevo de José Jaime Núñez Munguía en el SNTE 6.
¿La mandataria es mitómana o de plano sus funcionarios no le informan lo que sucede en su administración? El propio AMLO lo dijo en alguna ocasión: un presidente no puede justificarse diciendo que no sabía lo que hacían sus subordinados, porque el presidente lo sabe todo.
Así con los gobernadores: ellos saben todo acerca de lo que sucede en su administración. Indira Vizcaíno, que controla hasta el Congreso del Estado, cómo no iba a saber lo que pasa en el gobierno del Estado. Lo que sucede, por el contrario, es que miente cuando le conviene y hace creer que no sabe de alguna situación para no comprometer alguna opinión o decisión en ese momento.
Sus asesores, esos que cobran más de 60 mil pesos al mes por defenderla, no le informan lo que pasa en su gobierno. Se ignora si lo hacen porque Indira se enoja o no quiere escuchar; lo cierto es que los resultados están a la vista: corrupción galopante en su administración, violencia desatada y cruenta todos los días en la mayoría de los municipios, así como una ineptitud en materia política de parte de la gobernadora y sus empleados.
Indira miente y lo sabe y le tiene sin cuidado; eso lo debe tener muy en cuenta la sociedad colimense cuando la mande de regreso a Altozano en la revocación de mandato.
Un comentario sobre «Indira, el descaro de su mitomanía»
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