Armando Reyna, el payaso de las cachetadas

POR PXPress

ARMANDO REYNA MAGAÑA es el payaso de las cachetadas: todos lo agarran de su penitente. Y es que, como en cada sesión, el legislador de MORENA y presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política subió a tribuna a querer defender un decreto que, sin embargo, sabe que está mal, pero lo tiene que hacer para ganar puntos con los dueños del partido para obtener su sueño húmedo de ser el candidato a la alcaldía de Tecomán, cuando lo cierto es que sólo están jugando con él porque hay otras opciones antes en la fila. El caso es que, en la pasada sesión del Congreso del Estado, de nueva cuenta la mayoría oficialista y sus aliados, que ya se descararon en aprobar todo sin leer ni analizar (ejemplo: Evangelina Bustamante, Kate Castillo y Priscila García) presentaron ante el pleno un dictamen que reforma el Código Electoral del Estado de Colima, “con el fin de regular las remuneraciones de las Consejeras y Consejeros del Instituto Electoral del Estado, de igual forma la de las y los Consejeros Municipales del citado instituto, así como el de Magistradas y Magistrados del Tribunal Electoral del Estado de Colima, conforme a una remuneración adecuada por el desempeño de sus funciones y proporcional a sus responsabilidades, determinadas de manera anual y equitativa en los presupuestos de egresos de la Entidad”. Como suele suceder con ese tipo de decretos, los legisladores de oposición jamás conocieron el contenido hasta que la subieron a comisiones y la pasaron para dictaminar, por lo que, aun a contrarreloj, se detectaron diversas violaciones al procedimiento que, como ya ha sucedido con otras iniciativas de leyes, podrían ser vetadas por parte de instancias superiores, concretamente la Suprema Corte de Justicia de la Nación. El diputado Héctor Magaña, coordinador de la fracción del PRI, subió a tribuna para advertir las consecuencias de aprobar algo que no se consensó ni se analizó debidamente; de igual manera Crispín Guerra Cárdenas, coordinador de la fracción del PAN, habló en el mismo sentido, así como el coordinador de Movimiento Ciudadano, Ignacio Vizcaíno, quien atinó a decir que, cuando se da un revés a las leyes aprobadas por el Congreso del Estado, la autoridad competente no particulariza sobre alguna fracción o diputado, sino a todo el Poder Legislativo, por lo que, cuando dan a conocer un revés a una ley, quien queda con la mancha de la ignorancia en los procedimientos es el Congreso del Estado en sí. Armando Reyna Magaña, sin embargo, tuvo la desfachatez de subir a tribuna a defender el decreto en cuestión y a criticar, como es su costumbre, con el hígado, denostando a los legisladores por exhibirlos, pero sin reconocer la ineptitud de su equipo jurídico. Esta semana nos dimos cuenta que el coordinador de la fracción de MORENA es abogado; sin embargo, Magaña Lara lo conminó a regresar el título por la ignorancia y desconocimiento de los procedimientos jurídicos. El decreto que reforma el Código Electoral del Estado de Colima viene a ser la versión tropical del Plan B del presidente de la República de destazar a los órganos electorales que le incomodan. Aquí, aunque no han sido tan rebeldes como sus partes a nivel nacional, es claro que el oficialismo pretende desaparecer y reducir a su mínima expresión al Instituto Electoral del Estado y al Tribunal Electoral del Estado de Colima. Y aunque los diputados del PRI, PAN y MC señalaron que no están en contra de regular los salarios de los funcionarios electorales, hicieron hincapié en que la mayoría oficialista volvió a actuar sin consensar el decreto con los demás diputados y sólo para quedar bien con la gobernadora del Estado.

CURIOSO QUE, EN LA MISMA SESIÓN que se aprobó por mayoría el decreto que reforma el Código Electoral del Estado de Colima, en la votación se hicieron bolas y la presidenta de la Mesa Directiva, Evangelina Bustamante, no sabía cómo actuar. Resulta que algunos diputados faltaron a la sesión por estar en el evento de Manzanillo con la esposa del presidente de la República, Beatriz Gutiérrez, leyendo poesía y demás. Cuando se hizo la votación, parecía que no les alcanzaban los números; sin embargo, de repente por la plataforma Zoom se oyeron los votos a favor de Ana Karen Hernández, Rubén Romo Ochoa y Yommira Carrillo Barreto, que para nada participaron en la sesión, pero sí votaron. Lo curioso, en todo caso, es que al finalizar la sesión, cuando volvieron a pasar lista de asistencia, Evangelina Bustamante dijo que sólo tenía el justificante de un solo diputado, por lo que los demás que estaban en Manzanillo en el evento con la esposa de López Obrador tendrían falta. Al margen de revisar a fondo el reglamento del Congreso del Estado, si un diputado falta sin justificación no puede votar. ¿O sí? Porque, de ser el caso, el decreto que reforma el Código Electoral del Estado de Colima no habría pasado por no alcanzar la mayoría, ya que sólo un voto sería válido, que es el que sí justificó su ausencia.