POR Jorge Octavio González
En Colima ya se sabía que el mini fiscal Bryant Alejandro García Ramírez no es para nada confiable; tan sólo con ver que es el ahijado de la gobernadora Indira Vizcaíno y que fue propuesto para el cargo por el ex gobernador José Ignacio Peralta Sánchez semanas antes de irse, sus referencias dejan mucho que desear.
Las mismas organizaciones criminales que operan en la entidad también se han encargado de exhibir los nexos que tiene el ex secretario particular de Efraín Angulo Rodríguez con los otros cárteles de la droga, a los que apoya protegiéndolos y atacando a sus enemigos.
Pero lo que destaca ahora es la revelación que hicieron en el portal La Silla Rota, en el sentido de que tres fiscales de México, entre los que se incluye al de Colima, no son confiables. ¿De dónde proviene la información? Nada más y nada menos que de los informes confidenciales de la Secretaría de la Defensa Nacional, hackeados hace algunos meses por el grupo de hactivistas Guacamayas.
La información, guardada con recelo por los miembros del Ejército Mexicano, fue corroborada por el propio presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en todo momento ha minimizado el daño que puede causarle a su gobierno y a la seguridad nacional la ventilación de información resguardada por la institución militar.
Sobre los fiscales no confiables, según los reportes clasificados de la SEDENA, en la lista se encuentran Jesús Figueroa Ortega, de Aguascalientes; Alejandro Echevarría Cornejo, de Querétaro, y Bryant Alejandro García Ramírez, de Colima.
Para la institución en cuestión, ser “no confiable” es tener algún antecedente como un presunto vínculo con organizaciones como La Familia Michoacana o con el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Al mini fiscal de Colima los mismos delincuentes lo han relacionado con el CJNG, a quien, dicen, les allana el camino para que cometan sus fechorías en total impunidad, a la vez que ataca con operativos a sus enemigos, como Los Mezcales. Son tantas las veces que han exhibido esa información sin que el mini fiscal ni el gobierno del Estado salgan a desmentir o a hacer una aclaración.
“Hasta la fecha no se cuenta con información que lo relacione con integrantes de la delincuencia organizada o con alguna actividad ilícita, pero ha sido señalado en mantas que han aparecido en diferentes puntos de la ciudad de Colima que lo relacionan con el CJNG”, se lee en el reporte.
Las mantas a las que se refieren son unas en las que presuntamente José Bernabé Brizuela, alías “La Vaca”, líder del Cártel Independiente de Colima, le advierte que ya se dio cuenta de que está “con los Jaliscos” y le reclama por los cateos y aseguramientos que está realizando en su área.
De este fiscal, finaliza el documento clasificado de la SEDENA, se reporta que no ha brindado apoyo a autoridades militares.
De ahí, pues, la desconfianza que tienen los militares en el mini fiscal de Colima. Hay que recordar que en el operativo donde se aprehendió a La Vaca, en la Ciudad de México, ni la Secretaría de la Defensa Nacional ni la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CdMx dieron parte a Colima sobre lo que pensaban hacer ni sobre el operativo, hasta que ya lo tuvieron en sus manos.
De la misma manera no se les informó ni hicieron partícipe a Colima de la captura del operador financiero de Los Mezcales, que tuvo lugar en Guanajuato.
No por nada Bryant Alejandro García Ramírez aparece, junto con otros dos, como uno de los fiscales no confiables de todo México por sus nexos con uno de los cárteles de la droga que, por cierto, a nivel federal sí atacan.
A ver qué tanto lo mantiene Indira Vizcaíno si ha quedado acreditado, además de sus vínculos con una organización criminal, no tener resultados en combate al crimen organizado.
Prefieren mejor encarcelar a familiares de personas reportadas como desaparecidas que bloquean el Libramiento Ejército Mexicano.